El canto es una actividad humana que implica el uso de la voz, el oÃdo, el pensamiento y naturalmente la respiración, el ritmo y la expresión para crear música. Como una actividad multidisciplinar muchos beneficios para la salud fÃsica y mental, como por ejemplo mejorar el estado de ánimo, reducir el estrés, fortalecer el sistema inmunológico y estimular el cerebro. Pero, ¿qué procesos cerebrales se activan cuando cantamos?
La neurociencia como conjunto de disciplinas que estudian el sistema nervioso, su estructura, su funcionamiento y su relación con el comportamiento y el aprendizaje nos da algunas respuestas. El canto es una tarea compleja que involucra varias áreas del cerebro, tanto del hemisferio izquierdo como del derecho. De manera simplista, podemos decir que el hemisferio izquierdo se encarga de procesar el lenguaje, la lógica y el análisis, mientras que el derecho se ocupa de la creatividad, la emoción y la intuición. Al cantar, ambos hemisferios se comunican y se sincronizan, lo que puede favorece la plasticidad cerebral y la integración de ciertas funciones cognitivas.
Mientras cantamos se activan algunas áreas en el cerebro como por ejemplo:
El área de Broca y el área de Wernicke: son las responsables del procesamiento del lenguaje, tanto oral como escrito. Al cantar, estas áreas nos permiten comprender y producir las palabras de la canción.
El área motora: es la que controla los movimientos voluntarios del cuerpo. Cuando cantamos, esta área coordina los músculos de la laringe, la boca, la lengua y el diafragma para producir los sonidos vocales.
El área auditiva: es la que procesa los sonidos que percibimos por el oÃdo. Nos permite afinar nuestra voz y seguir el ritmo y la melodÃa de una canción.
El área lÃmbica: fundamental en la regulación de las emociones, los recuerdos y las motivaciones. Por esto, participar en un coro, tomar clases de canto o tener un encuentro en un karaoke con amigos, nos hace sentir placer, alegrÃa, nostalgia o tristeza, según el contenido y el tono de la canción.
Además de estas áreas, al cantar también se activan otras regiones del cerebro relacionadas con la atención, la memoria, la imaginación y la creatividad. La práctica consciente del canto es una forma de estimular nuestro cerebro y mejorar nuestras capacidades mentales.
Por otra parte, cuando cantamos con otras personas, liberamos hormonas como la serotonina y la oxitocina, que nos hacen sentir bienestar, confianza y conexión. Algunas investigaciones señalan que en un grupo se sincronizan los latidos cardiacos lo que genera una sensación de armonÃa colectiva.
En conclusión, el canto es una actividad que beneficia tanto a nuestro cuerpo como a nuestra mente en distintos ámbitos, por lo que te invito a practicar, conectar con tu respiración y tu voz y no sentir miedo ni vergüenza al explorar en el canto y compartirlo en grupo!
